2011.02.14 - 09:52:37 / radiorebelde. La Habana, Cuba.- La concepción del turismo se ha ido trasformando a través del tiempo. Su modernización le ha impregnado más dinamismo, de ahí la necesidad de conocer las potencialidades y deficiencias de la competencia y las suyas. Los gustos de los viajeros cada vez son más exigentes; por ello se necesita mayor especialización en la actividad, que permita brindar servicios con una adecuada coherencia en la relación calidad/precios.

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2011.02.14 - 09:52:37 / radiorebelde. La Habana, Cuba.- La concepción del turismo se ha ido trasformando a través del tiempo. Su modernización le ha impregnado más dinamismo, de ahí la necesidad de conocer las potencialidades y deficiencias de la competencia y las suyas. Los gustos de los viajeros cada vez son más exigentes; por ello se necesita mayor especialización en la actividad, que permita brindar servicios con una adecuada coherencia en la relación calidad/precios.

Este sector de servicios arrastra consigo el desarrollo de otros sectores como el trasporte, la construcción, la industria alimentaria, la tecnología, la salud, entre otros. Ellos se ven potenciados por el turismo lo que aumenta sus ingresos y producción. Además de demandar más fuerza laboral y generar nuevos puestos de trabajo, no solo en el turismo sino en los sectores que interactúan con el.

El turismo ha sido un sector clave dentro de la estrategia de desarrollo, aplicada por Cuba a partir de la década de los 90, donde se introdujeron nuevas modalidades de operaciones conjuntas con capital foráneo. El país logró reactivar la industria del turismo internacional hasta convertirlo en el primer renglón de la economía, durante varios años, y en la actualidad es el segundo sector que más divisas recauda en el país.

En la actualidad la industria turística enrumba su estrategia al ofrecimiento y divulgación de productos turísticos que logren satisfacer las exigencias del mercado. De ahí que en el leguaje del medio se hable de turismo temático de evento, aventura, negocios, cultural y algunos más excéntricos como los funerarios, místicos o espaciales.

La industria turística cubana debe diversificar más sus productos, pues se basa fundamentalmente en el de Sol y Playa. Este ocupa un 68,7% de la participación total de ingresos del sector en 2010, según datos de la ONE. Existen otras modalidades que el país puede explotar y no depender tanto de las particularidades del clima. La divulgación de nuestras tradiciones, desde la música, el cine, la danza es un potencial poco tratado.

En 2010 quedó inaugurado el turismo de crucero con la entrada en operaciones, por una empresa española, de la embarcación GEMINI y se añadió ADRIANA, buque maniobrado por una entidad rusa, que propicia el disfrute de un bojeo a Cuba. Sin embargo esta modalidad es aún incipiente, máxima, si se tiene en cuenta la ubicación geográfica de la Isla, la cual propicia esta actividad.

La salud es otro de los paquetes turísticos que presenta niveles bajos de desarrollo con una participación de 0,4 % en los ingresos del sector a la economía. Los logros alcanzados por Cuba en materia de salud son ampliamente reconocidos en el mundo entero. Entonces, por qué no trabajar en función de maximizar sus servicios en pos de ofrecer un producto más competitivo.

La diversificación del producto turístico cubano no solo deberá hacerse en función de la temática, sino en la ubicación territorial del mismo. Cinco provincias del país acaparan el 92% de las ventas de paquetes o productos turísticos, con la mención especial de Matanzas que ocupa el 49%.

La principal cantidad de visitantes que llegan al país provienen de Canadá, Italia e Inglaterra en ese orden respectivamente. Cuba también deberá explorar otros segmentos del mercado para conocer los intereses de esos públicos y crear productos atractivos que estimulen la visita a la Isla.

Fuente: RR

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