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• 06 / 11 / 2009

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Los cubanos se enteraron, a través del diario Granma, que el país no podrá importar este año "todas las materias primas, equipos y bienes de consumo" que necesita, y se deberán "reajustar las enormes erogaciones en combustibles y alimentos".

Como informa La Tercera, a principios de mes, se redujeron las raciones de porotos y sal. Cuba importa el 80% de los alimentos que vende a precios altamente subsidiados a través de una libreta de racionamiento.

Los cubanos reciben una cuota mensual de arroz, huevos, aceite y azúcar, entre otros. El gobierno reconoce que no es suficiente. Los cubanos completan su canasta de alimentos en mercados agropecuarios y en redes de tiendas que venden en divisas, señaló Reuters.

Como parte de las medidas, el comercio agropecuario será descentralizado desde el 1 de agosto en ciudad y en la región de La Habana. La comercializadora estatal pasará del Ministerio de Agricultura a 23 empresas con autonomía de gestión, para garantizar mayor acceso a los alimentos, señaló France Presse.

El abastecimiento de energía también es objeto de un plan de ahorro que cortó el aire acondicionado de las oficinas públicas. El gobierno no puede pagar ni un dólar más de combustible para generar electricidad y el consumo aumentó 3% en el primer cuatrimestre del año.
El programa partió el 1 de junio en el sector estatal e incluye una serie de acciones que van desde la disminución de la iluminación callejera y de edificios hasta la organización de "vacaciones masivas".


(Cope.es)