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• 04 / 15 / 2009

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Apenas difundida la noticia del levantamiento de algunas de las restricciones que el Gobierno norteamericano ha mantenido contra Cuba, se evalúan una serie de posibilidades para la isla, cuyas potencialidades podrían ayudarle a transformar su realidad muy rápidamente.

Y entre las posibilidades que abrirá el que más de un millón y medio de cubano-americanos puedan viajar sin restricciones entre ambos países se menciona el “turismo de la salud”.

No es ninguna novedad decir que los servicios de salud en territorio estadounidense son sumamente caros y que tal circunstancia abre la posibilidad para que otros países puedan competir por la atención de millones de norteamericanos que estarían dispuestos a viajar a través de la frontera si ello les representa un ahorro importante.

Para los cubano-americanos, que viven en Florida les resultaría mucho más barato volar a través del Caribe hacia la tierra de sus ancestros, para ya no hablar de las razones afectivas a recibir tratamiento.

Pero Cuba sí puede convertirse en una opción viable para los residentes de Texas o de cualquier otro estado de la Unión Americana pues en el país se han realizado progresos importantes en la materia y cuentan con la infraestructura para comenzar a ofrecer sus servicios en el momento que cualquier estadounidense pueda viajar sin restricciones a la isla.

(Vanguardia.com.mx)