La hipertensión arterial, responsable directa de dos de las tres principales causas de muerte en nuestro país —los infartos y los accidentes cerebrovasculares—, es un padecimiento diagnosticado a más de 2 millones de cubanos, ¡un 30% de la población!, y, según investigaciones realizadas, se estima que alrededor de 500 000 personas más desconocen que tienen la enfermedad.