Los cubanos se preparan para acudir masivamente al concierto de la estrella pop Juanes el 20 de septiembre en la Plaza de la Revolución de La Habana, pese a la fuerte movilización del exilio anticastrista de Miami, que acusa al colombiano de apoyar al gobierno comunista.

"Aún no sabemos qué invitados internacionales traerá Juanes, pero ese concierto va a ser todo un suceso este verano, a pesar de las pataletas de la gusanera (anticastristas) de Miami", declaró a la AFP Yeneydis Gutiérrez, estudiante de contabilidad de 19 años en la Universidad de La Habana. Yeneydis ya organiza su 'piquete' (grupo de amigos) para asistir al Concierto Paz sin Fronteras, mientras que muchos hacen planes para estar desde muchas horas antes en la Plaza de la Revolución, corazón político de la isla.

Lázaro Echeverría, restaurador de 22 años que trabaja en el Centro Histórico de La Habana, augura un "conciertazo", porque Juanes "tiene muchos fanes aquí". "La Plaza se va a poner al rojo vivo", apuntó.

Juanes, de 37 años y ganador de cinco Grammy Latinos en 2008 por su disco 'La vida es un ratico', compartirá el escenario con el cantautor Silvio Rodríguez e invitados de Argentina, España, Estados Unidos, Puerto Rico y Venezuela -aún por precisar-, entre ellos el español Miguel Bosé.

Creador de la fundación Mi Sangre en favor de víctimas del conflicto colombiano, Juanes celebró un Concierto Paz Sin Fronteras en el límite entre Colombia y Venezuela -que enfrentan tensiones-, y dice que en Cuba busca promover una acercamiento entre la isla y Estados Unidos, enemigos históricos.

Pero organizaciones del exilio en Miami acusan a Juanes de apoyar "la dictadura" de los hermanos Fidel y Raúl Castro y de cambiar "la camisa negra" por la "roja". Algunas rompieron discos y amenazaron con boicotear sus presentaciones en esa ciudad, donde el cantante vive con su familia.

El sitio digital oficialista Cubadebate publicó varios artículos de opinión que califican la reacción en Miami de "demencia", "pataleta", "infamia" y "grosería", y defienden que el clima de cierta distensión que viven Washington y La Habana es propicio para un "acercamiento musical".

"Un evento de Paz le molesta a la ultraderecha porque la naturaleza de esta gente es agresiva, como el bloqueo, y porque la idea y el hecho de la Paz socavan el odio que les alimenta", indicó Silvio Rodríguez en una entrevista reproducida el domingo en Cubadebate.

Maikel Mendoza, un mecánico de ascensores de 24 años, dijo coincidir con el fundador de la Nueva Trova Cubana. "Se trata de la misma payasada de siempre, que arman los que en Miami viven del negocio anticubano", comentó.

Juanes, quien gestionó su concierto en la Plaza de la Revolución en una visita a La Habana el 24 de junio, salió al paso a la ola de críticas y dijo no entender que se viera como "una molestia" fomentar "la unión entre los pueblos y derribar fronteras". "La música, el arte, deben estar por encima de toda ideología", afirmó el artista, en declaraciones al periódico colombiano El Espectador.

La cantante puertorriqueña Olga Tañón, quien se mostró inicialmente dispuesta a actuar en el recital, dijo el jueves que no sabía si viajaría finalmente a Cuba, aunque reiteró su apoyo a la iniciativa del autor de 'A Dios le pido' y 'La camisa negra'.

Otros cantantes internacionales como los españoles Ana Belén y Víctor Manuel, quienes han visitado la isla en varias ocasiones, lamentaron la "intransigencia" del exilio cubano y se mostraron dispuestos, si son invitados, a acompañarlo.

Fuente: AFP